Lo siento mucho, pero no puedo empezar este reportaje sin mostrar mi cabreo contra la maldita, oportuna e ilegal huelga de los controladores aéreos el pasado viernes. Gracias al egoísmo de estas personas, su lucha contra el sistema ha resultado más bien una grandísima guarrada para miles de personas que se iban de puente, como mi sisterina mayor y mi primísima, que se han quedado en Madrid y con la miel en los labios... ¬¬
Pero bueno, dejando atrás la mala leche y rabia que nos invadió... Mi sisterina noruega pudo venir, así que, aunque nos fastidió un montón no poder reunirnos todas, no ibamos a encerrarnos en casa cruzadas de brazos y sin respirar...
El jueves por la tarde llegó Teresa a Helsinki. Esa misma noche fuimos a un concierto de los punkis Radical Ninja en el Henry's Pub, con Svenja y su novio Jo, e incluso nos pasamos un rato por una fiestecilla Erasmus en el Jenny Woo Club.
El viernes nos recorrimos el oeste de la ciudad, adentrándonos en la Rock Churche, viendo el nevadísimo cementerio de Hietaniemi, imaginando la playa bajo una gran esplanada de nieve, silbando por el monumento de Sibelius... Luego estuvimos descansando en casa, recordando la comodidad de simplemente estar junticas, cenando tranquilamente con mis compis, y enterándonos de toda la movida en Madrid...
El sábado visitamos la parte este de Helsinki, con las cosas más importantes, como las catedrales, el puerto con todo el mar helado, el mercado viejo y las calles céntricas llenas de luces. Después de comer algo, nos metimos en el Museo de Arte Contemporáneo Kiasma, que no fue espectacular, pero estuvo curioso. También hicimos un intento fracasado de entrar al bar de Aki Kaurismäki, pero me da que está permanentemente cerrado... Jops. En su lugar, nos compramos 4 pelis finlandesas en oferta, jejeje. Y por supuesto, la tarde terminó con una buena sesión de sauna+nieve! :D
En fin, quedan un par de aventurillas más, pero terminaré el reportaje otro día, que ahora ando liadísima con mis trabajos y exámenes finales! Y ante todo quiero mandar un beso enorme a Irenuski y Palominchi, con las que ya planearé un viajecito a mi regreso para compensar esto! ^^
Sí, ha sido un chasco grande para todos haber tenido que cancelar el viaje. Menos mal que, al menos, ha podido ir la parte noruega. Habrá que dejar Helsinki para otro momento. Mientras tanto, espero que a todos los controladores que han causado semejante daño les den lo que se merecen. Así sea.
ResponderEliminarMe encanta la foto en la que estáis con la catedral de fondo... todo tan blanquito...