jueves, 16 de diciembre de 2010

Viaje a Laponia (I)

El último viaje de mi Erasmus no ha bajado el listón de los anteriores! Nos sólo el lugar era espectacular, sino que hemos hecho cosas muy divertidas y he disfrutado al máximo con esta gente que ya se ha convertido en mi pequeña familia en Finlandia...

La aventura comenzó el viernes 10 a las 20h en Helsinki, donde cogimos un fresquito autobús que fue parando y recogiendo más gente en Tampere, Jyväskylä y Oulu. A las 10.30h del día siguiente, llegamos a Rovaniemi. Allí visitamos el Arktikum Museum, con explicaciones de muchas de las cosas que estábamos a punto de ver en persona.

Después de hacer algunas compras alimenticias para la supervivencia semanal en un Lidl, nos fuimos al Santa Claus Village, donde llegamos ya de noche (sobre las 15h).

Aparte de la oficina central de correos donde puedes mandar postales y cartas navideñas, era una especie de parque temático para niños, con mucha tiendecita de souvenirs y demás, bonito para pasar un rato viéndolo iluminado. En vez de esperar 45 min. de cola y pagar 25€ por sacarnos una foto con Papá Noel, algunos preferimos tomarnos unos chocolates calientes en una "carpa" picuda típica de la zona alrededor de un fuego calentito.


Y sobre las 20.30h llegamos al fin a Inari, y en concreto a nuestras cabañas en el complejo de Vasatokka. Allí cenamos, nos repartimos entre dos cabañas de madera muy cucas (con cocina, baño y 10 colchones) y descansamos del largo viaje.

El sábado tocaba Survival Course. Tras una pequeña introducción teórica, tocó orientación en la nieve con GPS, buscando 10 cajitas escondidas en el bosque, viendo cómo no era de día hasta pasadas las 10h y con una especie de raquetas en las zapatillas que te mantenían siempre bien sujeto al suelo. Después nos dieron unos calentitos berry-juice, y comimos salchichas y puré de patata alrededor de un gran fuego. Además nos enseñaron cómo construir quinzees, hacer prender mejor una hoguera y pescar en el lago helado... Genial!









Sobre las 15h terminamos y nos dirigimos a una granja sami de renos. Allí les pudimos alimentar y dar un paseo en carros tirados por ellos. Luego nos metimos en una cabaña a tomar café y pastas en unas entrañables tazas de madera, mientras nos explicaban cosas acerca de los samis y cántabamos canciones suyas y de nuestros respectivos países. Muy curioso!










Y el último gran momento del día fue el sauna-time, con descansos corriendo a meternos en un agujero de un lago helado! Admito que la primera vez sólo fui capaz de meter los pies, pero a la segunda metí cuerpo entero! Yujuuuu! Después de aquello, nos arrejuntamos en una cocina a charlar, beber y comer macarrones! :D

5 comentarios:

  1. Ves como no es tan malo meterse en algo frío después de una sauna!! de verdad... que poca vergüenza

    ResponderEliminar
  2. ¡¡Qué envidia!! ¡¡Qué bien suena todo eso!! Aunque con lo friolera que soy, ¿habría aguantado esas temperaturitas que se estilan por allí?

    ResponderEliminar
  3. pff que importa el frío si disfrutas del viaje?? jajaja, y lo digo por experiencia!!
    Además supongo que con más capas que una cebolla se soluciona todo jajaja

    ResponderEliminar
  4. jo ke guay! y parece ke el agua del lago este estaba freskita eee jejej

    ResponderEliminar
  5. Jajaja, lo peor eran los 50m que había que recorrer hasta el lago! Qué dolor de pies con el frío! Y encima los escalones tenían hielo!

    Por otro lado, lo importante no es llevar muchas capas, sino ponerlas en el orden adecuado: capa térmica ajustadita, capa abrigada de lana y capa que proteja de viento y agua! :D

    ResponderEliminar